La pelea por el recorte del presupuesto de Colciencias, que terminó hoy con la salida de su directora Paula Marcela Arias, dejó en evidencia las intenciones del Gobierno de bajarle en un 15 por ciento la plata de ciencia y tecnología. Pero, además, quedó claro que sí habrá una modificación a la reforma para darle recursos del presupuesto nacional directamente a los gobernadores –una promesa que hizo el presidente Santos tres días antes de su reelección- y que esa plata tendrá que salir de algún lado. La pregunta sigue siendo de dónde.
La historia es la siguiente. Arias recibió el miércoles pasado una carta de Planeación Nacional en la que le anunciaban un recorte de 53 mil millones de pesos en el presupuesto de Colciencias para el 2015. Aunque éste era apenas un presupuesto inicial, que normalmente da inicio a una puja entre el Ministerio de Hacienda y la entidad para acordar el presupuesto final que quedará fijado el 15 de julio en un Conpes, lo cierto es que desde el principio el Gobierno planeaba un recorte para un sector que Santos convirtió en una de sus cinco locomotoras. Por eso ella se quejó públicamente durante un congreso que reunió a 700 científicos.
Esta mañana el Ministro Mauricio Cárdenas criticó la forma en la que Arias encaminó la discusión, que a su juicio debía ser interna y no mediática. Además, ratificó que el Gobierno está comprometido con la ciencia y la tecnología “como ningún otro [gobierno]” y que no habrá recorte.
Para demostrarlo dijo: “Algo que seguramente no sabe la señora Arias es que unos de los recursos de ciencia y tecnología están todavía reservados en el Ministerio de Hacienda porque son los recursos para las becas de los estudiantes que están en el exterior a través de Colfuturo. Si uno le suma eso, pues el presupuesto de ciencia y tecnología más que caer, lo que hace es aumentar”.
Sin embargo, La Silla supo que esos recursos nunca han hecho parte del presupuesto de Colciencias sino que son una partida presupuestal que sólo le pertenece a Colfuturo, que es un organismo privado de becas para estudiantes en el exterior. Si esos recursos entran a Colciencias es sólo para que, a través de este organismo público, lleguen a Colfuturo. “Colciencias no puede tocar esa plata”, le dijo a La Silla una persona que conoce el programa.
Eso confirmaría la tesis de que el recorte sí estaba previsto y que, a diferencia de lo que dijo Cárdenas, el presupuesto que le mandaron a Arias estaba completo, por lo menos en su versión inicial.
“Es una retaliación. Era innecesario que tres semanas antes de que se cambie el gabinete la echen. Si realmente no había problema, podían haber dicho simplemente que lo sentían mucho, que eso es apenas un cambio en el presupuesto y no pasaba nada. Pero ella lo reveló. Y es indudable que tenían previsto ese recorte”, le dijo a La Silla una persona de la comunidad científica.
Con la entrevista del ministro también deja claro que el Gobierno sí tiene planeada una reforma a la ley de regalías, un 10 por ciento de las cuales hoy se destinan a ciencia y tecnología a través del Fondo de Ciencia, Tecnología e Investigación.
Lo que busca el Gobierno ahora es que los proyectos que presentan los gobernadores no tengan que pasar a través de los OCADs, que son los comités que definen en qué se gasta la plata de las regalías y donde tienen asiento los gobernadores, el gobierno nacional y las autoridades municipales y que, antes de ser aprobados, deben pasar una revisión técnica de Colciencias.
Así, como le dijeron dos fuentes a La Silla, los gobernadores podrán definir directamente para dónde va esa plata.
Santos ya había hecho esa promesa en el Huila, departamento petrolero y generador de regalías, tres días antes de la segunda vuelta. “Las inversiones de regalías directas ya no tendrán que aprobarse a través de los OCADs, sino que llegarán de manera eficaz y sin obstáculos a los municipios y departamentos productores a través del presupuesto nacional”, dijo.
Cárdenas ratificó esta postura hoy, al decir que a los departamentos productores se les debía “compensar” la plata que perdieron por el nuevo sistema de regalías, a través del presupuesto nacional.
La pregunta entonces es de dónde saldrán esos recursos y a quién le quitarán plata, para poder dársela a los departamentos productores. Eso sólo se sabrá con exactitud el 15 de julio cuando quede definido el presupuesto general de la Nación y se sepa qué entidades sufrieron los recortes y sobre todo, a dónde fue a parar el mayor recaudo tributario.
Tomado de lasillavacia.com